-me llevaron al Retiro, y me metieron en un calabozo-
Carcelero: Vaya Vaya... Mira a quién han encerrado..
-Sacame de aquí! tengo que ir a salvarle!!!
Carcelero: eh eh! calmadito! que te quedas sin comer- se fue entre risas-
-me senté en la cama, llorando- Leo... Perdoname...